Como empleado de la Wolfensberger AG de Zúrich, Baumberger adquirió un sólido conocimiento de las técnicas litográficas, y lo utilizó para avanzar y renovar el medio, diseñando más de 200 carteles a lo largo de su carrera. La diversidad de la obra de Baumberger ejemplifica para muchos la historia del cartelismo suizo de la primera mitad del siglo XX.