Manual de titulares y subtítulos.
Los titulares y subtítulos presentan dos tipos de problemas: estructurales y tipográficos. Abordar la cuestión estructural facilita mucho el trabajo con la tipografía.
La cuestión estructural es que los titulares y subtítulos son señales para el lector. Los titulares captan la atención del lector. Los subtítulos estructuran y jerarquizan.
Aunque los titulares suelen estar pensados para causar impacto, también deben ser fáciles de leer. Los mejores titulares utilizan pocas palabras. Los titulares con muchas palabras, o que ocupan más de tres líneas, no tienen el atractivo y la fuerza de los que son breves y contundentes.
Los subtítulos orientan a los lectores. Los mejores crean una jerarquía clara y son algo más que simples marcadores de posición o etiquetas. Los lectores deben poder examinar los subtítulos y hacerse una idea general del documento. Los subtítulos también rompen visualmente los textos extensos y sirven de introducción a nuevos conceptos o cambios importantes en el contenido.
Los subtítulos deben diferenciarse del resto del texto. Cambie el estilo tipográfico, el tamaño, el color, póngalos en el margen izquierdo, lo que quiera, pero diferencie los subtítulos de los titulares. Si no lo hace, se convertirán en ruido y no en señales de tráfico.
Un tipo de letra para titulares, subtítulos y otros textos de gran tamaño suele ser suficiente. El tamaño y el color son las herramientas que hay que utilizar para crear niveles de importancia. Si desea utilizar más de un tipo de letra para mostrar, lo mejor es elegir ambos diseños de la misma familia: un diseño en negrita y otro en negrita condensada, por ejemplo.
Debe haber un contraste evidente entre los titulares y el texto. Un texto con un elegante diseño de serifa como ITC Galliard®puede contrastar con un fuerte diseño industrial sin serifa como Cachet™. Si el texto está en un tipo de letra utilitario como Perrywood™o Monotype® Modern, un diseño de pantalla como Carter Sans™proporcionará un contrapunto significativo.
Una vez resueltas las cuestiones estructurales, ocuparse de la tipografía es bastante sencillo. Seguir unas cuantas directrices facilita aún más las cosas:
- Los titulares deben ser obvios para captar la atención del lector
- Los titulares rara vez deben escribirse en mayúsculas, ya que las mayúsculas y minúsculas son más fáciles de leer. Además, ocupan más espacio y pueden ralentizar la lectura.
- Los tipos de letra decorativos y temáticos para titulares pueden aumentar el contenido o el mensaje del texto.
- El tipo de letra de los titulares y subtítulos debe contrastar con el utilizado para el texto.
- No escriba guiones dentro de un titular.
- Por lo general, los subtítulos no deben tener un tipo de letra decorativo.
- Las negritas son mejores que las cursivas para titulares y subtítulos.
- La puntuación en los titulares casi siempre parece demasiado grande. Redúzcala para que quede bien.
- Para evitar confusiones con los titulares, los subtítulos deben ir precedidos y seguidos de al menos tres líneas de texto.
- No subraye los subtítulos. De hecho, no subraye nada.
- Los contrastes tipográficos fuertes no suelen crear problemas, pero cuando se combinan tipos de letra de familias diferentes que se parecen mucho, el resultado puede ser una discordancia visual más que un énfasis.
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